Según los expertos, la envidia es un defecto propio de la condición humana, sin embargo, en ocasiones puede ser extremadamente dañina y por este motivo es necesario reconocer a las personas envidiosas de nuestro alrededor. Dentro de ésta existen distintos tipos, como la que puede existir entre hermanos, entre compañeros de trabajo o de carácter social relacionada con el estatus.
Conocé el antiguo ritual que te ayudará a alcanzar tus metas y atraer abundancia en 2024La palabra "envidia", según la RAE, se traduce por un intenso deseo de lo ajeno, ya sean personas, objetos materiales, estatus social, trabajo, pareja, aspecto físico o amigos.
Ana María Fusaro, licenciada en Psicología de la Universidad de Buenos Aires, habló sobre el tema en TN y aseguró: “Una persona envidiosa sufre de baja autoestima y una marcada inseguridad en su imagen personal. Seguramente el bloqueo se debe a conflictos traumáticos en su infancia o a conflictos familiares en la adolescencia”.
Además, explicó que todas las circunstancias vividas suelen traducirse en carencias afectivas que con el tiempo pueden desencadenar en la envidia.
Cómo identificar a una persona envidiosa
La gran mayoría de las personas en algún momento sintieron envidia, ya que es parte de la condición humana.
Hay casos extremos en que las personas no lo pueden controlar y esto se torna algo nocivo para ellos y su entorno.
Este sentimiento suele presentarse en distintas formas y con diversas manifestaciones que en algunos casos pueden ser sutiles y difíciles de identificar. Hay situaciones en las que la persona envidiosa la oculta debajo de actitudes que parecen ser con buenas intenciones.
Sarcasmo
El sarcasmo suele ser una de las manifestaciones más habituales dentro de la envidia, ya que la finalidad del sarcasmo es decir algo en forma de burla para dar a entender algo distinto o lo opuesto.
El mensaje sarcástico tiene un doble sentido, ya que las palabras que se dicen suelen esconder otro mensaje. Una de las formas más habituales de aplicar el sarcasmo es combinando un mensaje agresivo con uno amable, por ejemplo “qué lindo vestido, lástima que hayas engordado”.
Sinceridad
Las personas envidiosas no tienen filtro a la hora de decir algo, ya que esta supuesta sinceridad termina siendo una agresión. Suelen ser personas que critican sin ningún sentido ni derecho.
Este tipo de personas comparten su opinión o apreciación sin que nadie se la haya pedido, que por lo general suelen ser siempre negativas y no aportan nada positivo a la situación. Por ejemplo: “Deberías operarte la nariz en vez de los senos”.
Sadismo dulce
Las personas que son “sádicos dulces” parecen ser amables, ya que se muestran atentas, pero al momento de hacer algo terminan entorpeciendo o poniendo obstáculos para que la otra persona logre sus objetivos.
Suelen ser personas que siempre se defienden aclarando que no fue con malas intenciones, como por ejemplo pedir un favor importante y que al comprometerse se “olviden”.
Solidaridad mezquina
Este es una de las señales más frecuentes dentro de la envidia y suele ser una de las más dañinas. Se refleja siempre en el “solo quiero ayudar” y son personas entrometidas que solo quieren conocer la intimidad y asuntos personales de otros.
Con esta información que recaban, intentan generar conflictos que pueden ser dañinos y confusos en el entorno. Viven pendientes de la vida de los demás, opinando o dando consejos que nadie pidió.
Se comparan constantemente
Compararse con otras personas suele ser una actitud recurrente en los envidiosos; buscan la posibilidad de “ganar” frente a la comparación de otra persona.
Necesitan superar a todos por contraste, sin importar cuál sea el motivo de comparación, y en el momento menos inesperado dicen algún comentario minimizando el valor ajeno y resaltando el propio.
La especialista Fusaro explicó que todas las formas de envidia tienen expresiones de inseguridad, y suceden cuando la persona no puede verse de manera autónoma, sino que lo hace a través del resto.
El logro ajeno les destaca sus vacíos o insatisfacciones que pueden incentivar sus frustraciones. Es posible alejarse de personas envidiosas, pero es importante poder identificarlas ya que pueden generar mucho daño.